Hace poco más de un año, era difícil adivinar cómo quedaría el mundo tras la pandemia de COVID-19. Con 3,7 millones de muertes en todo el mundo y casi 600.000 sólo en Estados Unidos, está claro que muchas vidas no serán las mismas. Aunque la pandemia continúa, algunos aspectos de la vida se acercan a un ritmo más normal, ayudados por el aumento de 2.300 millones de dosis de vacunas. Este ritmo creciente no significa que las cosas vuelvan a ser como antes de la pandemia, especialmente en el mundo de los negocios a nivel internacional . Decir que COVID-19 cambió internacionalmente los negocios es quedarse corto.
Cuando empezaron los cierres el año pasado, muchas empresas a nivel internacional experimentaron interrupciones en las cadenas de suministro y en sus sistemas. La pandemia golpeó a las empresas internacionales. Rutledge Press ha publicado recientemente el libro Covid-19 and International Business: Change of Era, que examina el enorme impacto de la pandemia en los negocios internacionales. Aunque ningún blog puede tratar el tema en profundidad, veamos los temas generales sobre los cambios de los negocios a nivel internacional debido a la pandemia.
El COVID-19 cambió internacionalmente los negocios: Puestos de trabajo ampliados y restringidos
La pandemia COVID-19 tuvo efectos divergentes en las bolsas de trabajo de las que dependen las empresas internacionales. El año pasado, durante gran parte del primer y segundo trimestre, numerosos países en todo el mundo entraron en bloqueo al identificarse el COVID-19 primero como una epidemia y luego como una pandemia. Desde un punto de vista muy básico, este bloqueo provocó una disminución de los viajes internacionales, ya que las reuniones se trasladaron al software de videoconferencia para conectar a los equipos de todo el mundo. Muchas empresas ahorraron tiempo y los gastos asociados como resultado.
En cierto modo, la revolución de la videoconferencia durante la pandemia amplió el grupo de empleados potenciales. Ya no importa si su nuevo empleado está en China, Inglaterra o la India. Cuando todo el mundo puede reunirse a distancia, hay más oportunidades para el talento y la experiencia. Dados estos beneficios, es difícil saber cuándo -o incluso si- las empresas volverán a la misma cantidad de viajes de negocios y reuniones en persona.
Aunque el año pasado demostró los beneficios de las reuniones a distancia, aún está por ver si la pérdida de conexión en persona tendrá un impacto duradero en los acuerdos y contratos comerciales internacionales.
Para aquellas empresas en las que la ubicación es relevante -por ejemplo, en una planta de fabricación-, la capacidad de obtener visados de trabajo para inmigrantes o expatriados puede ser más difícil incluso después de que las restricciones de viaje de COVID-19 dejen de estar en vigor. Los países pueden seguir manteniendo requisitos estrictos para la entrada, y con las altas tasas de desempleo, la atención puede centrarse en proporcionar puestos de trabajo para la población local.
La pandemia interrumpió la globalización de los negocios internacionalmente
La globalización ha ido en aumento durante muchos años. Sin embargo, el COVID-19 interrumpió la globalización cuando el mundo se detuvo. Las Primeras predicciones del mes Mayo “aunque inevitablemente aproximadas a estas alturas, prevén un descenso del descenso del 13-32% en el comercio de mercancías, una reducción del 30-40% en la inversión extranjera directa y una caída del 44-80% en el número de pasajeros de líneas aéreas internacionales en 2020[i]. Estas cifras implican un importante retroceso de los recientes logros de la globalización, pero no señalan un colapso fundamental de la integración del mercado internacional”.
La alteración de la cadena de suministro ha desempeñado un papel importante en esta interrupción. Como resultado, muchas empresas han buscado formas de apuntalar sus prácticas empresariales y mantener la agilidad. La deslocalización es ahora una de las principales preocupaciones de muchas empresas. Esto no quiere decir que todos los negocios y la fabricación vuelvan a su país de origen. Sin embargo, la deslocalización puede aumentar para apoyar la continuidad del negocio. En la actualidad, las empresas que quieren deslocalizarse tienen un gran margen de maniobra, ya que no hay ninguna legislación que exija (o incluso apoye) la deslocalización.
La pandemia ha acelerado la transformación digital de los negocios internacionales
La pandemia también cambió notablemente el panorama internacional de los negocios al obligar a las empresas a integrar herramientas de transformación digital. Aunque la Revolución Industrial 5.0 se vislumbraba en el horizonte, la necesidad de trabajo a distancia, la innovación y la agilidad lanzaron a las empresas internacionales a la acción. De hecho, informó McKinsey que “la gran aceleración en el uso de la tecnología, la digitalización y las nuevas formas de trabajo se va a mantener”. Muchos ejecutivos señalaron que se movieron entre 20 y 25 veces más rápido de lo que creían posible en aspectos como la creación de redundancias en la cadena de suministro, la mejora de la seguridad de los datos y el aumento del uso de tecnologías avanzadas en las operaciones.”
El COVID-19 cambió internacionalmente los negocios: Fiscalidad
Hasta ahora, hemos examinado algunas de las repercusiones estructurales en las normas internacionales de los negocios. Sin embargo, también hay claras implicaciones y adaptaciones legales. La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico, por ejemplo, expone algunas de las ramificaciones fiscales en diversas jurisdicciones. La declaración examina circunstancias como la creación de establecimientos permanentes, las preocupaciones relacionadas con los cambios de residencia y los parámetros en torno a los ingresos de los trabajadores transfronterizos. Es evidente que la pandemia ha creado oportunidades y retos imprevistos en el tratamiento fiscal de las empresas internacionales.
Las dinámicas de la pandemia siguen afectando internacionalmente a los negocios
Aunque los casos de COVID en Estados Unidos han disminuido en los últimos meses, no es así en todo el mundo. Los países con menos acceso a las vacunas, como la India, han visto aumentar drásticamente el número de casos y muertes. Esto cambia las reglas del compromiso empresarial internacional. ¿Cómo actuarán las empresas cuando algunos de sus empleados estén inmersos en las ramificaciones cotidianas de la pandemia, mientras otros experimentan lo que es casi una “vuelta a la normalidad”?
A medida que pase el tiempo, el impacto de la pandemia en los negocios a nivel internacional seguirá desarrollándose. Es posible que pasen años antes de que las empresas aprecien y se adapten plenamente a la forma en que la COVID-19 cambió los negocios internacionales. Sin embargo, es fundamental que las empresas internacionales se mantengan comprometidas con las normas en constante adaptación; si no lo hacen, pueden de pronto quedarse atrás mientras otras empresas prosperan.
El Colegio de Abogados de Estados Unidos ofrece una gran cantidad de recursos para que los abogados de empresas internacionales aborden el COVID-19 y el Derecho Internacional. Los recursos cubren temas como el arbitraje, los requisitos de firma en persona, y las cortes y tribunales internacionales. A medida que los empleados experimentan más volatilidad e imprevisibilidad, las empresas internacionales tendrán que adaptar las prácticas y los procesos organizativos. Y las empresas internacionales necesitarán abogados cualificados para hacerlo.
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